Natación, taichi, pilates, gimnasia de mantenimiento, aquaeróbic… La programación de Logroño Deporte incluye una amplia oferta de actividades para mayores de 65 años en las que la prioridad es que todos los que quieran hacer ejercicio, “sea cual sea su condición física, puedan hacerlo”.
Pero su impacto va mucho más allá de mantener una buena forma física; participar en estas actividades que se desarrollan en grupo es una estupenda excusa para conocer nuevas personas y establecer relaciones sociales, según explica el concejal de Deportes del Ayuntamiento de Logroño, Francisco Iglesias.
Desde Logroño Deporte observan que las personas mayores son cada vez más conscientes de la importancia que el deporte tiene en su bienestar y en su salud. “Hemos notado un interés cada vez mayor por mantener ese tono físico y muscular”, para llegar a cierta edad en las mejores condiciones y envejecer en buena forma.
Iglesias destaca también el papel que la actividad física juega en la socialización, en la satisfacción que les aporta formar parte de un grupo, con el que luego “salen o hacen otros planes”. A esto se suma la posibilidad de interactuar con los monitores y monitoras, habitualmente gente joven, algo que “enriquece mucho a ambas partes”.
La socialización es, precisamente, un aspecto que está entre los objetivos de esta entidad deportiva. “Queremos que las personas mayores salgan de casa”, que la actividad sea una vía para “moverse por la ciudad, encontrarse con otra gente” y sentirse parte de un grupo. El deporte se convierte así en un modo de cuidar su salud mental y de combatir la soledad no deseada.
A las actividades dirigidas a mayores de 65 años se destinan el 10% de las más de 17.224 plazas programadas este curso. Para ellos, se organizan fundamentalmente actividades dirigidas y enfocadas a favorecer la salud evitando lesiones y “sin que nadie fuerce más de lo debido”. La oferta despierta gran aceptación ya que todas las plazas en cursos o activos o en las próximas actividades trimestrales están cubiertas en su totalidad.
Pero los abonados que suman más de seis décadas son también grandes aficionados a los gimnasios o salas de musculación y las piscinas. “Son los que más uso hacen de estos espacios”, señala el concejal de Deportes. Habitualmente, estos usuarios son personas que ya venían practicando deporte desde hace años y que quieren mantener esa condición física, sin tener que acudir a una actividad dirigida.
Los más fieles y los más críticos y exigentes
El colectivo de personas de más de 60 años constituye el 18% de los 40.327 abonados de Logroño Deporte. En este tramo de edad, ellas son las que más se animan a ponerse las zapatillas; constituyen el 56,37% de los abonados de esta edad, frente al 43,63% de hombres. Si hay algo que define a este grupo es, según explica Iglesias, “que son los más fieles”. “Repiten año tras año en las actividades, mientras se lo permite su salud”. Algo que no sucede en otras franjas de edad, en las que, en función de las circunstancias, se apuntan o no al programa deportivo.
También son los más críticos y exigentes. “Los mayores son los que te dicen si el agua de la piscina está fría, si un aparato no funciona, si hay demasiada gente, si la música es estridente…”. Algo que Iglesias agradece porque eso les hace estar “en continua mejora”.
Desde Logroño Deporte ya están trabajando en el programa deportivo del próximo curso, alentados por el éxito en el actual “con récord de inscripciones” en las actividades de invierno. “Nuestros esfuerzos están encaminados a fidelizar a nuestros usuarios y abonados y a mejorar la oferta dentro de nuestras posibilidades”.
El reto que se marcan, cuenta Iglesias, es ambicioso: “Queremos que Logroño Deporte, a nivel amateur, sea el primer referente de los ciudadanos para hacer actividades deportivas”.